Nuestra infancia: Generación de los 90

Muy buenas queridos lectores. Hoy os traigo un tema que os hará viajar en el tiempo, al menos a los que nacisteis por los 90: vamos a regresar a nuestra infancia. ¿Cómo? Muy sencillo, voy a escribir acerca de las series de dibujos que más nos marcaron, los juegos a los que solíamos jugar y nuestras canciones y poemas favoritos; que os harán recordar nuestra época como niños inocentes que éramos, donde no existían los problemas y todos éramos felices... ¿Empezamos?

Bien, en primer lugar, voy a tratar aquellos juegos que a los que solíamos jugar. Yo, al ser de pueblo, me juntaba con todos los niños de mi calle (ya que éramos todos de la misma edad) y jugábamos a los juegos más simples que os podáis imaginar, sin necesidad de electrónica: 

- Al escondite, echábamos a suerte "quien se la picaba" mediante "el zapatito blanco y el zapatito azul" y al que perdía o quedaba el último, le tocaba contar haciendo el "relojito relojito", un sistema infalible para contar hasta un número determinado despacio o deprisa. Solíamos jugar por la noche, puesto que para escondernos lo teníamos más fácil. Era muy divertido y nos lo pasábamos genial, corriendo de un lado a otro sin parar.

- El juego de la abuelita: la "mamá o abuelita" se sentaba y todos los niños se ponían lejos de ella, a la misma altura. Teníamos que decirle a la madre o abuela diferentes tipos de comida y, según si fuesen de su agrado o no, podíamos avanzar o quedarnos donde estábamos, o bien a pasos agigantados o pequeñitos.

- El pollito inglés: este juego me trae muchos recuerdos. Es parecido al anterior sólo que el que se la "picaba" tenía que contar: "1, 2, 3, al pollito inglés..." y todos teníamos que correr a tocar la pared, pero en el momento que el que contaba se diese la vuelta, teníamos que quedarnos todos quietos, como estatuas. Si te movías estabas perdido.

Estos son los juegos que más han marcado mi infancia. Aunque luego estaban los típicos juegos de peleas y superhéroes a los que todos hemos jugado en un momento de nuestras vidas. Ahora bien, no sólo estos juegos eran populares, sino que había otros de mesa que sacábamos a la calle por las noches y jugábamos, pero siempre acabábamos igual: peleándonos. Estos son algunos:

 Las cartas. Recuerdo que nosotros nos juntábamos en la calle y jugábamos a las cartas. Vamos ya éramos algo más mayores, unos 14 años, pero aún así nos reuníamos para jugar a la "cuatrola" o al mentiroso en la puerta de algunos de nosotros. Siempre terminábamos haciendo trampas, pero los momentos de risa no se olvidan así como así.

La pesca del pez. Recuerdo que con este juego nos pegábamos incluso porque ninguno queríamos perder. Creo que todos los niños hemos jugado a este juego, aunque no sé si los seguirán fabricando. Era muy divertido hasta que venía tu vecino y que quitaba con la mano los tuyos y los suyos, y claro, tu le pegabas. Ahora me río de todo eso, pero recuerdo que yo lloraba mucho de la rabia.

 El bingo. Reconocedlo: TODOS, mayores o niños hemos jugado a este juego. No todos hemos pegado a los demás o hacíamos trampas, pero todos hemos matado al gusanillo del aburrimiento con este juego tan adictivo. 

 Uff, de este ni me acordaba. "¿Quién es quién?" era un juego buenísimo, estupendo y donde todos hemos hecho trampas alguna vez. Yo la primera. Siempre mentía cuando intentaban averiguar quien era y luego alegaba que yo lo había dicho todo bien. Me encantaba ese juego y siempre lo tendré en mi mente. 

Como véis, a nuestra generación no le ha hecho falta la tecnología que hay a día de hoy. Nuestra mayor preocupación era que nos encontraran jugando al escondite y que nos salvaran para no tener que contar nosotros o que no adivinaran tu personaje antes que tú el de los demás. Gracias a estos juegos, nosotros hemos disfrutado de las noches de verano en la calle correteando y chillando con niños de nuestra edad. Me da pena ver nuestra calle tan vacía en noches de verano y tan silenciosa. Los niños de ahora crecen muy rápido y todo a base de consolas. Yo no tengo nada en contra de ellas, es más, me encantan, pero para un niño la infancia sólo se vive una vez, y es más bonito que un niño corra y salte y se ensucie que tenerlo sentado jugando con la consola. 

Ahora, para terminar, quiero dejaros las cabeceras de las series que marcaron nuestras infancias. Cada vez que escucho sus sintonías, los pelos se me ponen de gallina. Son muchos recuerdos los que te vienen a la mente cuando, al salir del cole, corrías a casa a comer y ponías la 2: Los rugrats, Digimon, Reena y Gaudi... te acompañaban siempre a la hora de comer. Luego por las tardes, en la 2 también tenías otras series de dibujos, y los fines de semana en Telecinco, tenías a Pokémon, la Banda del Patio y a muchos más que te esperaban con los brazos abiertos. 

En fin, mi niñez ha sido muy feliz, y en un futuro a mis hijos les enseñaré todas estas cosas y les pondré todas esas series para que pueda sentir como lo vivió su madre en un pasado. Espero que lo hayáis disfrutado. Aquí os dejo las cabeceras de nuestras series. Vedlo, disfrutadlo y seguid leyéndome. Un saludo a todos, gracias y hasta otra.